Cuatro trucos infalibles para calmar el hipo
Aparece sin razón, pero si dura mucho tiempo se convierte en un problema. Enterate todo lo que tenés que saber.
Según la Sociedad Americana Contra el Cáncer, el hipo consiste en una serie de espasmos que afecta al diafragma, ese músculo que se encuentra en el estómago y los pulmones y se usa, básicamente, para respirar.
Por lo general no suele durar tanto tiempo y suele ir acompañado de una leve tensión en el pecho, el abdomen o la garganta. Si dura más de 48 horas, es necesario recurrir a un especialista porque podría producir fatiga extrema, deshidratación, malnutrición o perdida importante de peso.
Según la Sociedad Americana Contra el Cáncer, el hipo consiste en una serie de espasmos que afecta al diafragma, ese músculo que se encuentra en el estómago y los pulmones y se usa, básicamente, para respirar.
Por lo general no suele durar tanto tiempo y suele ir acompañado de una leve tensión en el pecho, el abdomen o la garganta. Si dura más de 48 horas, es necesario recurrir a un especialista porque podría producir fatiga extrema, deshidratación, malnutrición o perdida importante de peso.
QUÉ NOS PUEDE CAUSAR HIPO
Existen distintos factores que pueden irritar el diafragma. El hipo puede empezar y terminar sin causa aparente.
- Comer demasiado o demasiado rápido
- Comer alimentos calientes o picantes
- Beber alcohol
- Tomar bebidas carbonatadas
- Enfermedades que irritan los nervios que controlan el diafragma
- Sentirse nervioso o emocionado
- Hinchazón de estómago
- Ciertos medicamentos
- Cirugía abdominal
- Trastornos metabólicos
- Trastornos del sistema nervioso central
REMEDIOS EFICACES PARA QUITAR EL HIPO
Agua fría
Beber un vaso de agua sin respirar puede ser una buena forma de quitar el hipo. El cambio de temperatura busco estimula el nervio vago y obliga al diafragma a contraerse. Por ende, se restablece la respiración.
Gárgaras con agua helada
Realizar un buche con agua bien fría permite bloquear el efecto de contracción y con el cambio de temperatura estimulando el nervio vago permite que se restablezca la respiración.
Aguantar la respiración
Esto se debe hacer durante al menos 30 segundos. Cuando aguantamos la respiración, el CO2 aumenta en la sangre y se activan los nervios responsables de los movimientos del diafragma, por lo que se restaura la respiración normal.
Respirar en una bolsa
Colar la boa bolsa al rededor de la boca y la nariz y respirar profundo cinco veces. Ello genera que el nivel de dióxido de carbono en sangre se incremente para ayudar a calmar el hipo.